viernes, 4 de octubre de 2013

"La señora Necedad"

Tomado del libro de los Proverbios 9,13-18 "La Señora Necedad es turbulenta, es estúpida y no sabe nada. Ella se sienta a la puerta de su casa, en una silla, sobre las alturas de la ciudad, para gritar a los transeúntes que van derecho por el camino: El que sea incauto que venga aquí, Y al falto de entendimiento le dice: ¡las aguas robadas son dulces y el pan quitado a escondidas delicioso!, pero él no sabe que allí están las Sombras, y sus invitados, en las profundidades del Abismo." Precioso pasaje de la Escritura para relatar una de las experiencias humanas más frecuentes: la necedad. El hombre necio es aquél que se contrapone al sabio. La sabiduría en la biblia es aquella que procede del Señor, y la persona que la posee es porque tiene su corazón abierto a recibirla en un gesto de superación espiritual constante, de viviencia de las virtudes y valores de la existencia humana. Pero vivimos en un mundo donde la Necedad se ha hecho dueña de las acciones humanas, siempre ha sido así, no vamos ahora a culpabilizar al siglo XXI, por las necedades que "hoy se llegan a saber mejor". Obviamente que los medios de comunicación del siglo nos ayudan a dejar en claro las diversas maniobras desleales de las personas, lo vemos, lo leemos constantemente. Y allí podemos descubrir que un gran número de hijos de Dios "han decidido vivir en las Sombras". Dios nos pone al alcance de la mano los medios para darnos cuenta, donde está la sabiduría de vida: los acontecimientos diarios, los pequeños gestos de amor, las generosidades de personas sabias, etc. Todo ello es una muestra del camino que debemos tomar. Pero recordemos que también tenemos el libre albedrío y éste puede llevarnos a rechazar los gestos de milagro que Dios nos regala y hacernos vivir en sombras permanentes. La palabra de Dios siempre es muy simbólica, es menester descubrir el mensaje detrás de lo que está escrito, dice que la señora necedad se sienta en la puerta de la casa, y en las alturas y desde allí "convence" a los necios y faltos de preparación espiritual. La imagen de estar sentado y gritando, significa autoridad y poder, o sea, nos dice que la necedad domina a los faltos de inteligencia, pero no es inteligencia racional sino inteligencia espiritual y de vida. Pero no todo está tan perdido, miremos hermanos los signos verdaderos de la presencia de Dios, vivamos las virtudes, la honestidad en la vida, la sinceridad, los valores humanos y cristianos, todo ello es el camino que conduce a la sabiduría y por más que la señora necedad nos grite desde su trono elevado, nuestros oidos no la escucharán, porque estaremos siguiendo y escuchando a la voz de nuestro Pastor Supremo: Jesucristo.