La Hipocresia de Confesar y el Abuso espiritual

Abuso espiritual

El abuso espiritual ocurre cuando una persona con autoridad religiosa o práctica espiritual maltrata a otra persona
en nombre de un dios, una iglesia o por algún concepto o misterio espiritual.
El abuso espiritual suele hacer referencia a un abusador que utiliza su mayor rango como ventaja sobre el abusado,
poniendo a la víctima en un estado de obediencia incuestionable a la autoridad.
Conductas
El abuso espiritual suele incluir al menos una de las siguientes conductas:
• Abuso psicológico.
• Acto o palabras que humillan, daña o menosprecian la dignidad de la persona.
• Intimidación. Sumisión a una autoridad espiritual sin derecho a réplica.
• Control irracional sobre el derecho básico de la persona a tomar decisiones en temas espirituales.
• Acusaciones falsas y críticas repetitivas, etiquetando negativamente a la persona como desobediente, rebelde,
falto de fe, demonizado, apóstata o enemigo de la iglesia.
• Aislamiento o separación de la familia y amigos debido a su filiación religiosa.
• Abusos sexuales.
• Exclusividad, dando a entender al abusado que las críticas exteriores vienen indicadas por el mal.
Definiciones
Los términos "abuso eclesiástico" o "abuso religioso" suelen asociarse con el abuso espiritual. El abuso eclesiástico
es una etiqueta identificativa de prácticas abusivas dentro de una iglesia; el abuso religioso se da dentro de un
sistema de creencias con prácticas comunitarias más que sobre la afiliación personal.
Características
Agnes y John Lawless argumentan en su libro The Drift into Deception que existen ocho características que aparecen
en el ámbito del abuso espiritual como son:
• Carisma y orgullo.
• Miedo e intimidación.
• Codicia y fraude.
• Inmoralidad.
• Estructura autoritaria.
• Exclusividad.
• Demanda de lealtad y honor.
• Hechos revelados.

Estos conforman algunas de los hechos sucedidos en el libro "La Hipocresía de Confesar", desde la experiencia de formación veníamos sufriendo los abusos del poder, poder de provinciales despiadadas, poder de formadora con ignorancia y fortalecida solo en su poder del cargo, eso fue destruyendo todas las relaciones. Pero para que vean la base científica de todo esto, aquí están los enlaces del tema, que lo vive "mucha gente en el mundo", solo algunos pocos nos atrevemos a denunciar, yo no pienso callarme hasta que se haga justicia.


Bibliografía en inglés
• Ken Blue, Healing Spiritual Abuse, (Downers Grove: InterVarsity Press, 1993). ISBN 0-8308-1660-7
• Ron & Vicki Burks, Damaged Disciples: Casualties of Authoritarian Churches and the Shepherding Movement
(Grand Rapids: Zondervan, 1992). ISBN 0-310-57611-3
• Ronald M. Enroth, Churches That Abuse (Grand Rapids: Zondervan, 1992). ISBN 0-310-53290-6
• Ronald M. Enroth, Recovering from Churches That Abuse (Grand Rapids: Zondervan, 1994). ISBN
0-310-39877-0
• David Johnson & Jeff VanVonderen, The Subtle Power of Spiritual Abuse (Minneapolis: Bethany House, 1991).
ISBN 1-55661-160-9
• Agnes C. Lawless and John W. Lawless, The Drift into Deception: The Eight Characteristics of Abusive
Christianity (Grand Rapids: Kregel, 1995). ISBN 0-8254-3163-8
• Flavil Yeakley (ed.), The Discipling Dilemma (Nashville: Gospel Advocate, 1988). ISBN 0-89225-311-8
Véase también
• Antirreligión
• en:Post-cult trauma
Enlaces externos
• Abuso espiritual.com [1]
• Spiritualabuse [2] Recursos para recuperarse del abuso espiritual (en inglés)
Referencias
[1] http:/ / abusoespiritual. com
[2] http:/ / www. spiritualabuse. com

¿Quién es Sor María de la Cruz?

Sor María de la Cruz nació el 11 de mayor de 1969, en Mataderos, Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Cursó sus estudios primarios en una escuela del estado en el barrio de Mataderos, Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Cursó sus estudios secundarios en un colegio religioso del mismo barrio, a cargo de las hermanas Esclavas de Divino Corazón de Jesús.
A los 15 años de edad, se sintió llamada por el Señor a su seguimiento a través de una inclinación fuerte por la oración y la vida contemplativa. Creció en su vida de oración, se preocupaba por ello, participaba de grupos de oración y tuvo intenciones de entrar en un Carmelo de clausura.
La oposición transitoria de sus padres, le llevó a trabajar de cajera en La Cooperativa el Hogar Obrero, creciendo en responsabilidad a medida que pasaban los años.
Ingresó en la Congregación del Pastor el 01 de junio de 1992, a partir de allí comenzó a estar en relación de dependencia con la Congregación, por un vínculo laboral primeramente.
Transcurrió el tiempo y el 08 de diciembre de 1994 ingresó al noviciado, consolidándose un vinculo religioso también con la Congregación.
El 08 de diciembre de 1996 pronunció a nivel religioso sus primeros votos en Alta Córdoba, pcia. Cordoba, en una ceremonia pública.
En diciembre de 1997 se recibe de profesora en Ciencias teológicas y filosóficas en el Instituto Superior Marista (Colegio Champagnat, Ciudad Autónoma de Buenos Aires)
Durante todo ese tiempo fue teniendo tareas de responsabilidad, pidiéndoles sus superiores que estudiara Administración de empresas para poder hacer mejor su trabajo administrativo.
El 19 de agosto de 2003, pronunció a nivel religioso su votos perpetuos.
El 07 de agosto de 2009 se recibe de Licenciada en Administración de Empresas en la Universidad Católica, siendo ya apoderada Legal de la Congregación, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
El 14 de septiembre de 2009 tuvo una discusión con su Superiora Provincial acerca de un tema relacionado con las hermanas, la superiora la amenaza explícitamente.
El 15 de septiembre de 2009 comienza un hostigamiento sistemático y violento para obligarla a dejar la Congregación.
Sor María de la Cruz resistió valientemente, fue despojada de toda tarea, recluida en su habitación, recibió indiferencias, maltratos, recortes económicos, calumnias, lo que le llevo a enfermar de depresión reactiva, ataques de pánico,etc, todos los síntomas vinculados al hostigamiento.
El 14 de agosto de 2010, debe salir de su lugar de castigo por orden de los profesionales ya que sus problemas de salud se iban agudizando hacia lo crónico.
Hoy Sor María de la Cruz está peleando por justicia, por sus derechos como persona, para que se esclarezca esta violación a sus derechos humanos, para que se esclarezca el modo de barbarie como fue tratada y dejada en la absoluta desprotección.
Hoy Sor María de la Cruz vive transitoriamente en la casa de los vecinos que la alojaron, y vive fielmente sus votos, mucho mejor que cuando estaba en su lugar de castigo.
Sor María de la Cruz siente la intuición de fundar una fundación para víctimas de violencia de género y para tener un lugar de contención para muchas mujeres, que como ella, han sufrido o sufren hostigamientos de parte de otras personas.

"La Hipocresía de Confesar" Biografía de Sor María

Queridos:
Con mucha paciencia el buen Dios me ha tolerado muchos errores de mi vida, pero, algún día había aprendido a obedecer a Nuestro Señor, mis hermanas en religión no creyeron que haya sido así, y llevadas de una furia incontenible y ensañamiento se propusieron eliminarme de la forma más dolorosa y con consecuencias irreparables.
Ultimamente Dios ya no tenía nada que reprocharme porque vivía en su Presencia y trabajando arduamente para la Congregación. Lo he dado todo, pero no fue correspondido. De Dios jamás me podrán separar porque El vive en mí y me ha consagrado para siempre. Estoy muy feliz de tener votos y nunca osaría firmar nada que me desvincule de ellos, es más, estoy dispuesta a pelear mi situación religiosa hasta las ultimas consecuencias, estoy dispuesta a trabajar arduamente y conseguir el dinero necesario y la constancia para que el Papa me reciba, pero por ahora ese paso me resulta lejano.
No obstante en pleno conocimiento de mi vocación tengo el deseo de crear una fundación para mujeres víctimas de violencia de género, yo fui una de ellas, y la violencia vino de parte de otras mujeres en una institución cerrada y de la que nadie tiene verdadero conocimiento. El libro también quiere dejar al descubierto situaciones injustas que se viven en ambientes cerrados y donde las justicia es muy difícil que pase. Pero hay que seguir luchando.
Siempre aferrados a Dios y a la oración, El es el que me da la fuerza, me costó mucho publicar este libro, editar un libro no es económico, todo lo contrario, pero yo he trabajado y ahorrado para llegar a este modo de hacer justicia. Espero que ustedes puedan leerlo con una mirada objetiva, desde los derechos humanos, desde la fe también. Gracias por todos. Bendiciones.